No sé si estoy teniendo una crisis bloguera o quizás no esté sola y más gente piensa igual…el caso es que quiero compartirlo con vosotros.

Últimamente he dejado de mirar muchos de los blogs que seguía, han perdido la esencia y la naturalidad. Todo publicidad, algunas bloggers ya no son inspiración de estilo: son vallas publicitarias. Ya no sabes si sus recomendaciones son sinceras o fruto del cobro de un contrato.
Por otro lado te das cuenta que casi todas llevan la misma ropa, el mismo bolso, las mismas zapatillas de deporte, siguen todas las tendencias habidas y por haber (bonitas o feas)… dónde queda la originalidad?

Después con el tema de conseguir seguidores/followers y fama: todo vale, fotografiar looks, un gatito, un plato de lentejas, un escaparate…varios selfies o fotos diarias para conseguir a diario cuantos más ME GUSTA mejor para ir subiendo en el ranking y recibir más ofertas de trabajos. Las fotos increibles claro… la mayoría sacadas por un fotógrafo profesional, eso si, atrás quedaron los novios/amigas paparazzi.

Con el furor de las bloggers convertidas a IT GIRLS salen miles de chicas que las imitan y que persiguen su forma de vida. Las aspirantes a blogueras de fama tienen mucho más trabajo, porque tienen que seguir a otras bloggers, marcas, modelos, etc para hacer un poco la rosca y así de paso que las sigan a su vez… buff qué pereza! Si lo haces sinceramente porque te gustan, te motivan, …estupendo, soy la primera que lo hace, pero comentar y seguir para que me sigan… Entonces pienso…seré yo que me equivoco en mi método? Escribo lo que me apetece, sigo a quien me gusta y comento cuando siento la necesidad. Está claro que me encantaría que mi hobby se convirtiera en mi trabajo, pero quiero que quien me siga lo haga porque le guste lo que hago no por un quid pro quo. Seguramente nunca llegue a nada…pero yo me siento realizada compartiendo un poco de mi y haciendo lo que me apetece en cada momento, que al fin y al cabo lo que persigo es pasarlo bien.

Esto me lleva a reflexionar de nuevo sobre si esta moda de las blogueras-modelos durará mucho tiempo, por ahora ya os digo que personalmente creo que se ha perdido la frescura, pero claro…cuando un hobby pasa a negocio… siempre cambia todo!